En un pequeño poblado perdido en
ese gran Continente llamado África,
vive una pequeña niña llamada Borobunduchi.
Su familia, al igual que su pueblo, es muy
pobre. Comen lo poco que cazan o pescan y
a veces tienen el regalo de frutos dulces que
les ofrecen unos pequeños árboles que rodean
el poblado.
Un día llegaron unos señores que decían venir
de Europa, les pusieron una antena parabólica
y una televisión en una de sus chozas, alimentada
por unos paneles solares. Ese aparato tan raro,
le hizo ver cosas fantásticas y otras un poco feas
de lo que existe en el mundo.
Pero Borobunduchi cogió lo bueno, lo bonito, lo
que hacía que la gente se divirtiese y fuesen felices.
Entonces comenzó a soñar con subir en uno de
esos pájaros de acero y volar hacia ese mundo FELIZ.
Desde entonces recorre todo el poblado con un
pequeño avión de madera, esperando que su sueño
se haga algún día realidad, pero lo hace siendo muy
feliz con su gente. Sin prisas, sin angustias, ella vive
su vida como una niña, jugando y volando hacia su
futuro.
Que seas feliz Borobunduchi, vayas donde vayas.
BMR. (Clic en la imagen para ampliar)
